<Pedro>
Habías quedado preocupado después de ver a Paula asi…tan
callada. Tan…¿triste?, aunque no te dijo exactamente lo que habia pasado,
sabias que eso la tenia mal, y eso , hacia que también te sintieras asi…igual
que ella.
Ella te agradeció por haberla respetado y por haber estado
con ella, y juraste que estarías allí siempre que ella lo necesitara…la
protegerías por siempre.
Dia lunes, primer dia de la semana, y por supuesto dia
laboral…Habias pensado en la posibilidad de ir a ver a Paula antes de que
entrara al colegio, pero decidiste no hacerlo…no querías asfixiarla. Obviamente
que le hablarías mas tarde.
Tu mañana comenzó con miles de archivos, casos que estaban
en manos de Miguel, cosas que venían del juzgado, cosas que tendrían que ser
llevadas para ser firmadas por un escribano…entre miles de otras cosas mas que
tendrías que ponerte a revisar…y rogabas para que pudieras hacerlo bien, y que
no se te hiciera tan tedioso.
Mientras te tomabas un pequeño y corto recreo, agarraste tu
celular…de ahora en mas, tus recreos serian para poder pensar en ella con
tranquilidad…y eso te hacia sonreir.
-¡Buen dia mi amor!...espero que estes llevando bien este
dia, y que estes un poquito mejor, aunque ayer me quede un poco preocupado…y contéstame cuando puedas.
Te quiero♥…-le enviaste y dejaste tu celular-
Te levantaste de tu
asiento, dispuesto a salir de tu oficina para buscar un poco de café. Te
encontraste con Sara charlando con Miguel…quien parecía preocupado…
-¿Pero qué te dijeron?...-pregunto a Sara-
-Nada…solo me dijeron que se desmayó…-la escuchaste
decir…¿de quien estarán hablando?-
-Tengo que salir para allá ahora mismo…ocúpate Sara, por
favor…-dijo el, dejando a Sara detrás de el. Vos caminaste hasta Sara, a quien
tambien notaste preocuada-
-¿Qué paso Sarita?...¿porque Miguel se fue
asi?...-preguntaste-
-Paula…se desmayo en el colegio y lo llamaron de
urgencia…-te dijo, y sentiste que tu corazón se detuvo-
-¿Qué? ¿Cómo? ¿Qué le paso? ¿esta bien?....-preguntaste
notablemente preocupado tambien-
-No se…me llamaron del colegio y me dijeron que necesitaban
la presencia de su padre…-te dijo y comenzaste a sentir calor-
-Ojala este bien…-dijiste, y pasaste tu mano por tu frente
sudada-
-Si, ojala…Miguel casi se muere cuando le dije que se
trataba de Paula…-te dijo-
-Me imagino…-dijiste-…voy a seguir con mi trabajo Sara,
avísame si saben algo…si puedo ayudar tambien..-le dijiste y te sonrio-
-Dale Pedrito…-te dijo y te diste la vuelta, para dirigirte
nuevamente hasta tu oficina-
Ni bien cerraste la puerta, largaste un suspiro…¿Qué le
habría pasado?. Tenias miles de preguntas sin respuestas, y probablemente no
sabrias que pasaría con ella…¡Dios! ¡que no le pase nada por favor!...te
dijiste a vos mismo y cerraste tus ojos con fuerza…
Cuando, llego la hora de irte, te diste cuenta de que no
habias terminado con tu trabajo…te la pasaste pensando en Paula, estabas muy
preocupado…Necesitabas saber de ella.
Escuchaste la puerta de la oficina de Miguel cerrarse, y ni
siquiera lo dudaste ni por un segundo…Saliste de tu oficina para ir
directamente a la de tu jefe…El estaba sentado en su sillón.
-Hola Miguel…¿Cómo esta?...Vine a preguntar como estaba su
hija, Sara me conto lo que había pasado….-le comentaste-
-Sigo con el susto todavía… Al parecer no habia comido nada
desde ayer en el almuerzo ni tampoco desayuno hoy…-te dijo, y suspiraste-
-¿Pero esta bien?...-preguntaste-
-Si…perfecta, ya está en con su mama…-te dijo-
-Que bueno…un susto enorme para usted…-le dijiste-
-¡Si!...casi me muero cuando Sara me dijo que la llamada
venia del colegio…-te comento-
-Me imagino…. Y bueno, ahora que se que ya esta todo bien,
me retiro…y que termine muy bien su dia…-le dijiste-
-Muchas gracias por preguntar Pedro…y vos también…-te dijo el con una sonrisa-
Te retiraste del estudio largando un gran suspiro y con una
sensación de alivio enorme…Ni bien estuviste sentado en el auto, agarraste tu
celular y decidiste llamarla, necesitabas escucharla, necesitabas confirmar vos
mismo que ella estaba bien…El teléfono sonó, una…dos, y a la tercera escuchaste
su voz…
-¿Pepe?...-pregunto ella, con una vocecita apagada-
-¿Amor?...¿estas bien? ¿Qué te paso?...-preguntaste todo muy
rápido-
-Si gordo, estoy bien…solo fue un desmayo, y todo porque no
comi…-te dijo ella-
-¿Y asi me lo contas?...¿como no vas a comer Paula?....Esto
podría haber sido peor…-le dijiste con un tono serio en tu voz-
-Si mi amor, ya lo se…Perdon, es que no tenia ganas de
comer, no tenia hambre…-te dijo ella-
-No pidas perdón princesa…cuando escuche que llamaron al
estudio casi me muero…¡Gracias a Dios que estas bien!...¡estaba a punto de
enloquecer!...no podía hacer nada, estaba lejos tuyo, no podía ir al colegio,
no podía llamarte…-le dijiste-
-Perdon por asustarlos asi…mi papa también se asusto mucho,
y lo primero en que pensé cuando desperté fue en vos…-te dijo y sentiste que tu
corazón dio un latido fuerte-
-Yo también estuve pensando en vos mi princesa… estoy tan
feliz de escucharte…-le dijiste-…me imagino que estas comiendo, ¿verdad?...¿te
vio algún doctor?...-preguntaste y escuchaste una pequeña risita de su parte-
-Si, ya comi amor…no te preocupes… y si, me dijo que tengo
que hacer reposo, solo por hoy, y que por supuesto me alimente bien….-te dijo
ella-
-Me encanta escucharte llamarme asi…-le dijiste-
-a mi tambien me gusta decirte asi…te juro que ya me
acostumbre…-te dijo y pudiste saber que sonreía-
-Estoy muriendo por verte…¿sabes?, por eso tenes que hacerle
caso asi nos vemos pronto…-le dijiste-
-Si gordo…te prometo que voy a hacer todo, asi nos vemos
mañana…-te dijo ella-
-Por supuesto que si… y te dejo mi amor, cuando llegue a
casa te vuelvo a llamar, ¿si?...¡Te quiero!...-le dijiste-
-Bueno gordo…espero tu llamada entonces.... no vayas a olvidarte
eh…, y tambien te quiero…-te dijo y sonreíste-
-De ninguna manera voy a olvidarme, si te estoy pensando
todo el dia…-le dijiste riendo-…Bueno, ahora te llamo, lo prometo…¡ y hacele
caso al doctor!...-le recordaste y escuchaste su risita-
-¡Si!...¡te lo prometo!...chau amor…-la escuchaste decir, y
seguido de eso, cortaste la llamada-
Sentias una paz tremenda al escucharla y saber que estaba
bien…Fue un susto enorme, pero por suerte ya estaba a salvo y en su cama…
Llegaste a tu casa y recibiste uno de esos calidos abrazos
de mama…Te quedaste almorzando con ella y contándole lo que habia sucedido con
Pau, ella tambien se preocupo, pero le hiciste saber que ya estaba bien…y por
supuesto, te pidió para que la trajeras, quería conocerla…
Cumpliste con tu promesa, y la llamaste después de almorzar.
Se quedaron charlando un rato, y luego ella te dejo, para que pudieras
descansar…y una vez mas, confirmabas lo mucho que te gustaba, y cuan enamorado
estabas de ella…